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La piel


La piel es una frontera con todo el exterior, es decir con todo lo que consideramos que es diferente de lo que, a nivel de cuerpo, somos. Por la piel captamos lo externo y nos reflejamos en lo externo, de manera que tiene una función doble.


Existe un punto de nuestra piel que refleja cada órgano. Eso es lo que permite funcionar disciplinas como la reflexoterapia, la digitopuntura y los diferentes tipos de masajes.


En cuanto a enfermedades de la piel, podríamos decir que hay dos grandes tipos: las que suponen una ruptura desde dentro, (inflaciones, erupciones, abscesos) y las que suponen una inflamación desde fuera (heridas, operaciones). En ambos casos nuestra frontera, es decir nuestra piel, es atacada.


En una erupción hay algo que quiere salir y tanto lo desea que llega a romper la piel. El ejemplo más claro son los granos producidos por el acné, que se adjetiva como acné juvenil, pues es en ese momento cuando se produce.


Lo que ocurre es que en la pubertad, después de la infancia más o menos tranquila, irrumpe una nueva fuerza: la sexualidad. Esa fuerza nueva cambia muchas cosas sobre como éramos pocos años antes, nos gustaría reprimirla y volver a ser niños, pero ya no es posible. Además la sexualidad lleva consigo fantasías de las que el joven, a menudo, se avergüenza. Hay así una lucha: una nueva energía quiere aflorar pero por otra parte se intenta que eso no suceda.


El miedo al instinto despertado es lo que produce el acné.


El acné aparece como protección frente al sexo y así aparece en lugares visibles como la cara, el escote de las chicas y generalmente (al menos fue mi caso) siempre en el peor momento (cuando uno tiene una cita importante o en fechas de verbenas y fiestas, etc.) Es la vergüenza por la sexualidad lo que nos provoca granos que nos dan vergüenza. Es de sabiduría popular que el mejor remedio contra el acné es


vivir la sexualidad Pero dejando el tema del acné juvenil podemos decir que toda erupción supone que algo que está reprimido en nosotros quiere salir.


Otra enfermedad común en la piel es la psoriasis. Consiste en escamas que aparecen en la piel. Al nivel que nos interesa aquí esas escamas actúan como una coraza, de manera que no dejan entrar nada más allá de la frontera que es la piel, pero tampoco dejarán salir nada. Ello como toda coraza, denota miedo a ser herido. Pero si bien las corazas protegen con ellas no puede entrar el amor ni la ternura.


La psoriasis denota miedo a ser herido


Por último vamos a hablar un poco de los ataques de picor. Cuando uno se rasca convulsivamente, con desesperación, indica que hay un deseo, una pasión que quiere ser descubierto, por eso escarbamos en nuestra piel, para encontrarlo.


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