Los yoguis hinduistas y budistas son las personas que más han indagado sobre el Pranayama. Y ya desde los albores de su historia nos ofrecen su conocimiento de textos sagrados como el védico Chandodya Upanishad. Éste fué descrito y traducido por el erudito británico en textos sagrados Monier Williams (1819-1899) quien también nos dejó un diccionario del sánscrito al inglés que aún se edita hoy en día. A través de la traducción de este manuscrito conocemos una historia interesante.
Los ojos, el oído, la mente y el aliento de vida entablaron una acalorada discusión sobre quién era más importante para la vida en el cuerpo. Después de una larga disputa llegaron a la conclusión de que cada una de ellas se alejaría del cuerpo para comprobar qué sucedía. La vista se alejó y los ojos se cegaron. El oído también lo hizo quedando los oídos sordos. También la mente se alejó y dejó al cuerpo en estado de coma. A pesar de todo ello, el cuerpo pudo seguir con sus funciones dentro de sus limitaciones. Cuando le tocó el turno de alejarse al aliento de vida, la vista, el oído y la mente sintieron una fuerte sacudida, como si les arrebataran o arrancaran la vida y, de inmediato, le suplicaron que no se marchara, que volviera al cuerpo. Esta historia o texto sagrado fue escrito entre los siglos cuatro y ocho antes de Jesucristo.
Esta historia nos brinda la oportunidad de reflexionar sobre la importancia de la función más básica el ser humano: la respiración y, de lo poco que la tenemos en cuenta para mantener una buena salud en nuestra.vida.
La palabra Pranayama deriva del término “perfección” sánscrito que y designa un amplio conjunto de técnicas respiratorias que al practicarlas aumentan la calidad del oxigeno, eliminando las sustancias tóxicas, aumentado la energía vital.
La palabraPranayama tiene dos significados:
- Prana más Yama significa control del Prana, de la energía vital
- Prana más Ayama significa expansión y detención del Prana.
Hay muchas técnicas de Pranayama, tanto los yoguis como Paramahansa Yogananda, y otros santones (como se les conoce en India) han contribuido a expandir sus beneficios por todo el mundo, a través del Yoga.
Para los orientales el Prana está en todos los lugares, ya que es la energía vital, la fuerza que alimenta y moviliza todo el Universo y está presente en las aguas, en los alimentos, en el aire, en cada uno de los seres animados o inanimados.
A través de él nuestro organismo se nutre y se libera de impurezas. Absorbiendo el oxígeno del aire y eliminando el dióxido de carbono de nuestras células para que éstas puedan continuar haciendo el intercambio de gases, posibilitando las minuciosas y múltiples funciones en nuestro organismo de una manera saludable.
Una de las distintas prácticas de Pranayama es la Respiración alterna o alternada. Es una técnica para experimentar la respiración, una puerta que nos permite purificar el cuerpo y la mente.
Una de nuestras muchas responsabilidades para mantener una buena salud es recordar que es necesario observar la naturaleza de nuestra mente. Ésta también puede encontrarse en un estado de toxicidad como, por ejemplo: la necesidad de calmar la mente de ruidos, bajar el volumen de los pensamientos recurrentes y tóxicos y ser conscientes de su nocividad. Observar cuándo me estoy preocupando en vez de ocuparme de ello, y así evitar que la mente se me lleve a su terreno, que es divagar. Solo si soy consciente de ello puedo ser más libre y si soy más libre puedo decidir, y elegir desde la libertad, y esto sólo puede suceder desde la observación de la mente, ya que ésta la necesitamos para crear, pensar, organizar, etc. Es necesario mantenerla limpia y relajada para poder observar desde qué lugar estoy alimentando la mente.
A medida que uno va practicando va experimentando el silencio interno, la paz, la comprensión, un espacio interior que al experimentarlo nos conecta con la experiencia de la expansión, la calma, la paz interna. Tal como dice en su libro el neurobiólogo Antonio Damasio, En busca de Espinoza: “la mente es un proceso no una cosa”.
Cada vez más, el compendio mente, cuerpo y emociones, está tomando más consciencia en el campo científico, ya que al integrarlo en un plano mucho más amplio en nosotros mismos, nos permite mirar al ser humano como a un todo, en constante evolución. Este nuevo paradigma ayuda a ampliar a la comprensión de una inteligencia mucho más amplia que la inteligencia intelectual, y sumarla en otra más amplia como la inteligencia emocional. No se intenta dividir, si no sumar. Tomar esta nueva visión nos brinda la posibilidad de comprender, experimentar e integrar que el ser humano no sólo es un cuerpo lleno de sistemas y funciones fisiológicas que nos permiten vivir, si no que es mucho más que eso. Científicamente se puede decir que es una suma de estados, que ejercen y tienen un impacto en nuestro cuerpo para desarrollar nuestra consciencia para ser más conscientes y experimentar la alegría de ser.
Por ello la respiración y sus técnicas nos ayudan a conectarnos con todas estas partes de nosotros mismos y a ser conscientes de nuestra esencia y conciencia. Y tal como continúa diciendo Antonio Damsio en su libro, “Conciencia y mente no son sinónimos en cambio Conciencia y mente-consciente” sí lo son.
Y por ello para continuar indagando es importante conocer con más detalle la respiración Pranayama, Respiración Alterna, una entre muchas técnicas que nos invitan y ayudan a explorar este camino interior.
Pranayama está compuesto por: los Nadis Pingala, Nadis Ida, Sushumna canal central. Los Nadis son los canales energéticos y los tres principales son:
Pingala- Nadi, asociado al lado derecho del cuerpo (hemisferio izquierdo), aumenta la fluidez en el sistema simpático, el lado masculino (el Sol).
Ida- Nadi asociado al lado izquierdo del cuerpo (hemisferio cerebral derecho) aumento de la fluidez del parasimpático, el lado femenino (la Luna).
Sushumna: el canal a través de la columna vertebral, con la que se unen los dos lados, los hemisferios cerebrales. Cuando se práctica este Pranayama se equilibra el canal central por medio de la retención respiratoria.
Cómo hacerla
Nadi Pingala
Para ejecutar esta respiración, exhalaremos el aire en primer lugar. Taparemos de una manera suave la fosa nasal izquierda e inhalaremos por la fosa nasal derecha, obturamos unos segundos y exhalamos por izquierda. Todo Pranayama culmina con una inhalación para que el sistema nervioso no sufra. Este proceso se repite diez veces.
Nadi Ida
Soltamos el aire de la fosa nasal irquierda y, inhalamos por la fosa izquierda, obturamos y exhalamos por la derecha.
Cuando se practica este tipo de Pranayama se actúa, equilibrando el canal central por medio de la retención de la respiración y otros centros energéticos como los Bhandas. Este proceso se repite diez veces.
Esta práctica nos permite; mejorar las funciones cerebrales, regula el metabolismo, mejora nuestro estado emocional, y calma la mente, nos ayuda a unifica, armonizar y a no sentirnos separados de la Naturaleza.
Camil•la Riera
